Hemos restaurado las antiguas pajares transformándolas en dos acogedores alojamientos de gran calidez y confort manteniendo el estilo rústico. «3 habitaciones dobles y 2 baños. Salón-comedor-cocina y terraza grande. La casa está rodeada de bosques bien cuidados, fuentes y arroyos. Piscina, pista polivalente. Tenemos todo lo necesario para ofrecerle una estancia relajante y agradable.