Casa rural construida siguiendo la tradición de la zona, piedra vista, pizarra y madera. La casa está situada en el casco antiguo de Taüll, junto a la iglesia de Santa Maria, una de las joyas más importantes del románico, declarada recientemente Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, que se puede contemplar desde cualquier lugar de la casa.Esta se distribuye en alojamientos, cuya capacidad abarca desde las dos hasta las siete personas. Todos equipados con calefacción, TV, lavadora, chimenea, ropa de cama y utensilios de cocina. La casa dispone, asimismo, de servicio de guarda esquís, un espacio de jardín con terraza y un aparcamiento reservado para el uso exclusivo de los huéspedes. La misma casa cuenta con un establecimiento en el que se pueden adquirir productos alimenticios elaborados artesanalmente o carne de cordero criados en la casa. Además, ofrece servicio de taxi para llevar a cabo distintas excursiones por la zona del Parque Nacional de Aigüestortes y Estany de Sant Maurici, paraíso por excelencia del agua, envuelto por grandes montañas, es considerado uno de los tres parques de alta montaña de la Península Ibérica. Marco paisajístico grandioso y difícil de encontrar repetido en lugar. Cardet y Cóll, el sitio de Saraís y el Balneario de Caldes de Boí, donde hay una excepcional variedad de fuentes, cuyo agua disfruta de propiedades curativas y relajantes. A la inmensa belleza de su paisaje, con bosques de haya y abetos, prados verdes y pueblecitos de piedra y pizarra, se añade un espleto de iglesias románicas que forman uno de los conjuntos más excepcionales y emblemáticos del país, patrimonio no sólo de nuestra cultura, sino ahora también de la humanidad. Todas estas iglesias de arquitectura armoniosa fueron construidas desde la segunda mitad del siglo XI hasta la primera mitad del siglo XII. La silueta de los esbeltos campanarios que apoyan a las iglesias contribuye a dar carácter y personalidad a la región. Pasado el pueblo de Taüll, continuaremos por la carretera hasta llegar a las pistas de esquí de Boí-Taüll Resort, donde la gran oferta de pistas de diferentes niveles hace que, sin movernos del mismo sitio, todos, tanto novatos como experimentados, podamos disfrutar de este deporte.